La Palabra de Dios es activa y penetrante; sus palabras no son letra muerta en un papel.
Hebreos 4.12, 13
Puesto que el discernimiento espiritual es la capacidad de ver la vida desde la perspectiva de Dios, es necesario que sepamos cómo piensa y actúa Él. La Biblia es la revelación inmutable e infalible de Dios mismo. Sin embargo, el Señor no nos da simplemente una lista de verdades acerca de su manera de ser y de sus caminos. En cada página de la Biblia, Dios revela quién es Él y cómo actúa.
Aunque la Biblia es antigua, no es anticuada. Es un libro vivo y renovador que le habla directamente a usted. Sus historias pueden haber tenido lugar hace siglos, pero sus principios y aplicaciones tienen vigencia y relevancia hoy. Es nuestro manual de instrucciones para la vida en el que se encuentra la guía para tomar decisiones.
La Palabra de Dios es activa y penetrante; sus palabras no son letra muerta en un papel. Ellas penetran nuestros corazones y juzgan nuestros pensamientos y motivaciones. Esta cualidad condenatoria es la razón por la que a algunas personas no les gusta leer la Biblia. Pero el discernimiento es esencial si no queremos seguir cometiendo los mismos errores una y otra vez. Algunos cristianos viven a un nivel superficial, sin comprender nunca por qué reaccionan a situaciones de la manera que lo hacen. Pero si abordamos la Palabra de Dios con un espíritu abierto, ella arrojará luz sobre nuestros motivos ocultos y revelará pecados ignorados.
El discernimiento espiritual implica ver no solo nuestras circunstancias, sino también vernos a nosotros mismos desde la perspectiva de Dios. ¿Ha aprendido usted a aceptar la espada penetrante de la Biblia? Recuerde que la Palabra de Dios corta solamente para poder curar.
Devocional original de Ministerios En Contacto