Nos encontramos viviendo en una de las épocas más violentas, amenazadoras, dramáticas, corruptas, y más confusas que la humanidad ha tenido. Hemos pisoteado los mandamientos de Dios y rechazado al único que nos puede ayudar: Jesucristo.

Nos encontramos viviendo en una de las épocas más violentas, amenazadoras, dramáticas, corruptas, y más confusas que la humanidad ha tenido. Hemos pisoteado los mandamientos de Dios y rechazado al único que nos puede ayudar: Jesucristo.