La única manera de tú vencer el temor de los que te persiguen, el engaño de la gente, la culpabilidad y la condenación de tus errores pasados y saber que todavía Dios te quiere próspero, es porque entiendes que Él hizo un pacto.

La única manera de tú vencer el temor de los que te persiguen, el engaño de la gente, la culpabilidad y la condenación de tus errores pasados y saber que todavía Dios te quiere próspero, es porque entiendes que Él hizo un pacto.