No hay nadie que haya captado la atención de Cristo, que no haya recibido un milagro. ¿Cómo puedes tú captar la atención de Dios? Moviéndote en lo valioso. Recibe esta palabra.
No hay nadie que haya captado la atención de Cristo, que no haya recibido un milagro. ¿Cómo puedes tú captar la atención de Dios? Moviéndote en lo valioso. Recibe esta palabra.