Dios siempre envía alguien a tu vida para que te lave y te unja los pies. Alguien que haga lo que se requiere, lo necesario para que tú continúes tu camino, para que tú sigas caminando con Dios.

Dios siempre envía alguien a tu vida para que te lave y te unja los pies. Alguien que haga lo que se requiere, lo necesario para que tú continúes tu camino, para que tú sigas caminando con Dios.