Honduras

Lo increíble se hizo realidad, en Honduras tenemos toda una cadena de televisión cristiana. Miles están siendo transformados y edificados con el poderoso evangelio de Jesucristo.

Cuidado, no nos acostumbremos a esta enorme bendición, dejando de lado lo que Dios nos ha confiado.

Personalmente vivo agradecido, maravillado y alabando al Padre de gloria. Acompáñeme en un coro que bendice y exalta a Dios por sus dones y también por los hombres y las mujeres que financieramente sostienen esta obra.

¡Usted es parte de ellos! Gracias por apoyarnos con sus ofrendas.

He sido inspirado a recordarle tres cosas:

Primero, véase a si mismo o a si misma en asociación con Dios para algo grandioso y eterno: salvar al mundo.

Segundo, nunca olvide que al plantar con fe en la obra de Dios, su ofrenda como semilla esta destinada a reproducirse y multiplicarse. Cuando ore diga: “Padre, gracias porque soy ofrendante de la televisión cristiana, recibo lo que es mío según tu promesa, medida buena, apretada, remecida y rebosando. Tú haces que abunde en mi toda gracia; que tenga siempre en todas las cosas todo lo suficiente. Gracias Padre por enriquecerme en todo, por multiplicar mi semilla como también las ocasiones para dar”. (Lucas 6:38, 2 Corintios 9:8 “€“ 11).

Confié en el Señor siempre, Dios tiene un serio compromiso con cada dador alegre. ¡Si, con Usted!

Tercero, no deje de dar para la televisión cristiana, el sembrador exitoso separa de cada cosecha la mejor semilla para sembrar de nuevo, garantizado mas cosechas y graneros llenos. Y mantenga en su memoria que la televisión cristiana depende exclusivamente de sembradores fieles como usted.

Le saludo evocando lo dicho por Jesús: “¡No tengo miedo, yo he vencido!”. (Juan 16:33)

Sinceramente,
Dr. Evelio Reyes
Presidente
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