El Señor tiene un plan para su vida. Tiene una voluntad perfecta y un propósito específico en mente para usted.
Jeremías 29.11
El Señor tiene un plan para su vida. Tiene una voluntad perfecta y un propósito específico en mente para usted. No obstante, muchos cristianos tienen miedo de la voluntad de Dios, porque requiere fe en el Padre celestial. Y aunque por lo general somos rápidos para creer en Dios para pedir por las necesidades de otros, a menudo somos lentos para confiar en Él en cuanto a las nuestras. Para hacer las cosas más confusas, muchas personas malinterpretan lo que es, en realidad, la voluntad del Señor. Algunos creen que es un conocimiento especial que se imparte solo a personas superespirituales. Otros piensan que es un llamado a hacer algo arriesgado, doloroso o incómodo. Muy a menudo, la voluntad de Dios es vista como algo que tenemos que hacer, queramos o no.
La verdad es que no hay que temer a la voluntad de Dios. Él tiene la intención de darnos claridad de propósito y capacidad para poder disfrutar de abundantes bendiciones. Además, nos ofrece orientación a cada paso y respuestas a preguntas y cuestiones importantes. En una era en la que incluso nuestros autos pueden recibir instrucciones en tiempo real, en cada giro que deben hacer, de satélites en lo alto del espacio, ¿por qué tantas personas resisten la guía de Dios? Porque a pesar de que necesitamos algunos consejos sobre cómo proceder, preferimos conducir nosotros mismos. Podemos dejar que Dios nos sugiera a dónde debemos ir, pero queremos ser nosotros quienes controlemos el volante. El Señor sabe adónde se dirige usted, y cómo conducirle de manera segura. No le confíe solo el destino final; deje que guíe cada paso de su viaje.
Devocional original de Ministerios En Contacto