Comprender las razones por las que otros nos fallan ofrece un poco de consuelo, pero Dios provee el consuelo que ningún ser humano puede dar. Isaías 43.1-7 Como humanos, todos pecamos. Todos tenemos debilidades y períodos de sufrimiento. A menudo, cuando surgen dificultades, recurrimos a nuestros seres queridos. Pero ellos también son humanos y están […]
Leer másYa sea que estemos afligidos por nuestras pérdidas personales o por los pecados del mundo, el Señor está con nosotros. El mundo nos dice que no vale la pena afligirnos por nuestro pecado; que debemos olvidarnos de los errores del pasado y disfrutar el momento, para no perdernos algo emocionante. Pero el dolor es una […]
Leer másLa Palabra de Dios nos asegura que el Padre celestial escucha nuestro clamor y responde. Mateo 14.29, 30 Repica el teléfono, y usted contesta. Una voz triste le informa de una tragedia. Su corazón está tan afligido que se siente paralizado por la angustia. ¿Qué hace? Las malas noticias, el peligro y el dolor hacen […]
Leer másCuando buscamos al Señor, Él se convierte en nuestro refugio. Salmo 25 ¿Qué le motiva a hablar con Dios? A lo largo de la Biblia se nos ordena orar. De hecho, Cristo consideraba que la oración era tan esencial que se apartaba con regularidad de las multitudes para pasar tiempo a solas con su Padre (Mr […]
Leer másDios nos ha llamado a vivir una aventura de obediencia, y no a vivir cómodamente. Isaías 6.8 Creo que es evidente que la sociedad en que vivimos es muy egocéntrica, y lo mismo podría decirse de la iglesia. Cuando un cuerpo local de creyentes tiene un enfoque interno, su efectividad en el ministerio comienza a […]
Leer másAunque no entendamos nuestras circunstancias, podemos encontrar consuelo en el hecho de que Dios sí lo hace. Génesis 50.15-21 La historia de José en el Antiguo Testamento es uno de los ejemplos más conocidos de que el Señor bendice la vida de alguien por medio de experiencias difíciles. En el pasaje de hoy, el esclavo […]
Leer másEl consuelo y el cuidado de Dios son suficientes para superar cualquier dolor. 2 Corintios 1.3, 4 El cuidado de Dios por nosotros se extiende aun a los detalles más pequeños de nuestra vida. Él sabe cuando sus hijos sufren, y anhela consolarles (Is 49.13). La compasión del Señor es personal, continua y está siempre […]
Leer másNada de lo que podamos hacer podrá separarnos del amor de Dios. Juan 8.1-11 Una aflicción es una presión demoledora que amenaza con destruirnos. Nuestra salud, nuestra paz mental o nuestras relaciones pueden peligrar. Sabemos que Dios nos consolará cuando estemos enfermos, pero, ¿estará Él con nosotros cuando estemos sufriendo por los pecados que hayamos […]
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